Cogitating: To expose or not expose

Rihanna, Kendall... and then the world

Espero que nunca se desate la guerra entre los partidarios del exhibicionismo y los del normcore, porque quienes preferimos el minimalismo y lo sobrio llevamos las de perder en el momento en que Rihanna desenfunde un pezón... huy perdón... el puñal. En serio, empiezo a estar preocupada. La de Barbados fue elegida como icono de la moda en la entrega de premios de la CFDA hace unas semanas. Vale, no le discuto a la entidad americana el impacto de Rihanna sobre la moda: es una cantante de pop de un gran éxito y su estilo a la hora de vestir dentro y fuera del escenario va a marcar tendencia. Pero creo que ponerla a la altura de Kate Moss o Iman es pasarse tres pueblos y más. 

El anuncio del galardón me dejó intranquila, pero el modelo que Rihanna eligió para recogerlo me dejó de piedra. Sabemos que a la chica le gusta llamar la atención y al presentarse envuelta en transparencias más que traslúcidas nos ha corroborado que no sólo sigue siendo la reina del neo-chonismo, sino del exhibicionismo. Me gustaría ver la cara de Anna Wintour en el momento en que se enteró del atuendo de la cantante. A la pobre señora Wintour no le quedó otra más que tirar para adelante porque sino, no hay gala.

Y cuando ya estábamos cicatrizando las heridas del rihannazo, ahí se nos presenta una de las anfitrionas de los MuchMusic Video Awards en Toronto, Kendall Jenner. La hermanastra de Kim Kardashian, ahora conocida por sus dotes de modelo, apareció con un vestido de Fausto Puglisi que deja un poco más de lugar a la imaginación, pero aún a riesgo de que a Kendall se le salga el hueso de la cadera.

Por cierto, no es que de repente la vena monjil se haya apoderado de mi persona, pero es que, seamos francos, ¿dónde está la belleza en estos dos casos? ¿Dónde está la elegancia? Los cristales Swarovsky bajo los que se cubría Rihanna no eran adecuados para una entrega de premios por mucho que la cantante sea una de las galardonadas y estemos en el marco de la moda. Digamos que el protocolo hay que seguirlo, a veces. Y a Kendall todavía la persigue el fantasma del clan Kardashian, que para algo continúa siendo parte del reality show 'Keeping Up with the Kardashians' por aquello de cumplimiento de contrato, a pesar de que pese en su recién estrenada carrera de modelo. Y al final se le ve el plumero, o más bien, la cadera, aunque lo suyo todavía no ha llegado al nivel de gravedad de Rihanna. El tiempo nos dirá.

Por lo de pronto, armaos de vaqueros, camisetas blancas y zapatillas de las de toda la vida por aquello de no quedarse sin arsenal en el bando del normcore. Yo ya estoy haciendo acopio para que no me pillen desprevenida.

Getty Images via Teen Vogue

I hope the war between exhibitionism followers and normcore followers never bursts, 'cause we who prefer minimalism and sober kind have nothing to gain since Rihanna draws a nipple... I mean... the dagger. Seriously, I'm starting to be worried. The Barbados girl was nominated as Fashion Icon by CFDA some weeks ago. Fine, I'm not going to argue with the American entity about Rihanna's impact on fashion: she's a great successful pop star and her style in and out of the stage is going to set trends. However, I believe that having her at the same level as Kate Moss or Iman is going too far and further.

The award announcement made me feel worried. But the dress that Rihanna chose for the related gala left me stunned. We know that this girl likes to call for attention and showing wrapped among transparencies more than translucent has confirmed us that not only she keeps reigning as neo-chav queen, but also exhibitionism queen. I wish I could have seen Anna Wintour's face when she noticed about the star's attire. Poor madame Wintour only could keep going 'cause, if not, there wouldn't have been gala at all.

And when we were already healing the scars by the rihannazzo, there she shew one of the hosts of the MuchMusic Video Awards in Toronto, Kendall Jenner. Kim Kardashian's step-sister, now better known as per her modeling qualities, shew up in a Fausto Puglisi dress which leaves a little bit more of room for imagination, but still with the risk of Kendall's hip bone pops out.

By the way, a nun streak hasn't seized my persona, but (to be honest) where is beauty in these both cases? Where is elegance? The Swarovskis under which Rihanna was covered were not appropriate for an award gala; no matter that the pop star is one of the awarded ones and we are under the fashion umbrella. Let's say that protocol must be follow, sometimes. And about Kendall, she is still chased by the Kardashian's clan ghost; so that's why she keeps starring the reality show 'Keeping Up with the Kardashians' in order to comply with the contract, though it's influencing her new born career as model. And finally, you know what she's up to, or better, her hip is up to, though her exhibitionism has not reached the level of Rihanna's. Time will tell us.

As of now, prepare for war with jeans, white tees and classic sneakers if you don't want to run out of weapons at normcore faction. I'm already getting supplies to not get surprised.