Antiguallas, artilugios inservibles, telas que quieren aparentar más viejas, baúles, maletas, jarrones, porcelana...China. Todo esto y más podéis encontrar en el mercado de antigüedades de Xintiandi en Shanghai. Yo siempre digo que mi barrio tiene una parte muy glamurosa, donde Cartier se pelea mano a mano con Harry Winston, y otra parte que yo he bautizado como Chinolandia, dentro de China. Y es hora de que conozcáis esta vertiente. No todo van a ser vistas impresionantes coches carísimos, glamur, lujo y demás.
Noodles frescos al lado de un garaje-tienda-habitación-salón donde arreglan la rueda de una bici, mientras que un dentista no sabe si sacar una muela al vecino que se pasea en pijama o afilarle las uñas al cangrejo que da los últimos manotazos en una tina de todo a cien (o todo a un cuai). Té en sus múltiples variedades, tofu maloliente (aunque los chinos se empeñen en decirme que es un manjar), fruterías donde no encuentras tomates (porque las verduras las venden en el mercado de abastos), pollo seco, sonidos guturales que prefieres no escuchar... Puede parecer muy brusco, desagradable, pero tiene su encanto (los sonidos no).
Y perdón por toda la enumeración. Creo que hoy tocaba mercado de antigüedades. Operativo todos los sábados... creo que desde bien temprano. Tras una parada ante unas pinturas y varios souvenirs para los turistas que nos visitan cada sábado, ahí estaban los jarrones. Todas las formas, todos los colores. Con más y menos solera. Y ahí empieza el diálogo monetario... en este caso monólogo... con la vendedora. En una botica quedaría perfecto y es probable que estuviese destinado a guardar té. Es la nueva adquisición y espero que no la última, porque en este rastro sólo faltan las tapas y las cañas.
Old junk, useless devices, fabrics that pretend to be elder, trunks, suitcases, vases, Chinese...china. All this and even more you can find it at Xintiandi Antique Market in Shanghai. I always say that my district has a very glamourous side whrere Cartier fights hand in hand with Harry Winston, and other side which I have named as Chinaland, inside China. And it is time for you to meet this aspect. It is not all about incredible very expensive cars, glamour, luxury and so on.
Fresh noodles besides a garage-store-bedroom-livingroom where you can get fixed your bicycle wheels, while a dentist debates whether extracts a back tooth to that neighbour who loafs about in his pyjamas or sharpen the nails of a crawfish that is giving its last slaps inside a all-for-one-hundred (or all-for-one-cuai) tub. All varieties of tea, stinky tofu, (even though Chinese people insist on telling me it is delicious), dried chicken, throaty sounds you prefer not listen to them... It may be seem rude, unpleasant, but it is quite lovely (not the sounds).
And sorry for the huge list. I guess I was talking about the antique market. Opens every Saturday... very early, I think. After a quick stop at the paintings and some souvernirs four tourists that come every Saturday, there they are the vases. All shapes, all colours. More or less vintage. And here it comes the monetary dialogue... monologue, in this case... with the vendor. It would look like wonderful in some chemist's and it maybe was destined to preserve tea. This is my new acquisition and I hope it is not the last one, because in this flea market I only miss some beers and tapas.
Credits: Jacket (Pull & Bear SS2013), T-shirt (Pull & Bear SS2013), Jeans (Pull & Bear, old), Shoes (Vans, old), Bag (Zara SS 2013), Bracelets (Pull & Bear 2013).